Ataca a José El Yerberito;
Doctor Minusvalúa públicamente la Medicina Tradicional Ancestral y
Demoniza a quien la practica
Por: Tai Pelli
16 de abril de 2017
Hoy, domingo 16 de abril de 2017 me
llegó el artículo publicado por el periódico El Nuevo Día de la Columna “Tribuna
invitada” y el artículo del Doctor Fernando Cabanillas, titulado: “Yerberitos Brujos y médicos ciegos”. Me
pareció interesante, que el doctor nunca haya escuchado del “Yerberito”, aparte
de la canción que nuestra Reina de la Salsa Celia Cruz inmortalizó, como él
mismo aclara, nunca había escuchado de un yerberito puertorriqueño.
Me pareció de tan mal gusto que lo
primero que hizo fue tratar de demonizar al respetado Sr. José Torres con lo de
“Yerberitos brujos” y encima, tratar
de ridiculizar a nuestro hermano, quien posee un fenotipo indígena NUESTRO,
Taíno-Jíbaro-Borikeno, y luego que lo describe incluyendo aretes y su cola
larga azabache, en su burla infiera “a los gurús no les da bien la moda del
rubio”; ¿por qué hizo eso? ¿qué quiso inferir el Dr. Cabanillas?
Es obvio que el Doctor Cabanillas, no
está muy enterado de las cosas que están sucediendo en la isla. Muchos sabemos
que El Yerberito ha salido por televisión, varios reportajes de periódicos y
son muchísimas las personas que han sido muy agradecidas de los remedios de
Medicina Tradicional Ancestral que ha compartido con ellos.
Comparte en el artículo información
de los métodos de sistema de control que se utilizan para estudiar medicamentos
y Uff! Es como si con esa parte del artículo nos fuera hacer salir corriendo a
que nos receten más pastillas, dados todos los estudios de control y apuntes de
estadísticas. Yo no considero que haya que irse a extremos, pero me pregunto
por qué el doctor aparenta defender tanto la industria farmacéutica. ¿Acaso no estamos
cansados de escuchar anuncios que nos dicen algo como (y aquí seré sarcástica):
“¿Tiene dolor de cabeza? Pastillita TAL ¡te
va a quitar el dolor de cabeza! ¡Ten una vida sin dolor!, ¡Sé feliz!- …y ves a
la gente sonriendo y el vientito dándole a los cabellos y la grama verdecita y
hasta crees oler las flores …y de repente – efectos secundarios pueden ser:
calambres, se le van a reventar las tripas, le va a afectar el hígado, puede convulsionar,
quedar ciego, sordo y hasta en algunos casos hasta la muerte. Hable con su médico
hoy, para ver si usted es candidato la tomar Pastilla TAL. Diga NO al dolor de
cabeza.”
Hablar del tema de la Industria
Farmacéutica sería escribir un libro y ése no es el propósito. Sin embargo, estudie
e investigue la industria y verá que no es basada en “buscar soluciones”. Hay
medicamentos que son muy buenos, y de ninguna manera nadie dice “No vaya al medico
y no tome pastillas recetadas.” Pero el demonizar y tratar de ridiculizar la
Medicina Tradicional Ancestral como lo hizo este caballero, es una manera
arrogante y lamentablemente irresponsable.
Primero, de más está recalcar que la
Medicina Tradicional Ancestral es una medicina milenaria; haga un poco de
investigación y mire a ver cuánto tiempo lleva la contemporánea.
Pero vayamos un poco más a fondo,
leamos parte de lo que dice la Declaración de las Naciones Unidas sobre los
Derechos de los Pueblos Indígenas sobre la medicina tradicional:
Artículo 24
1- Los pueblos indígenas tienen
derecho a sus propias medicinas tradicionales y a mantener sus prácticas
de salud, incluida la conservación de sus plantas medicinales, animales y
minerales de interés vital. Las personas indígenas también tienen derecho de
acceso sin discriminación alguna, a
todos los servicios sociales y de salud.
2- Las personas indígenas tienen igual derecho a disfrutar del nivel más
alto posible de salud física y mental. Los Estados tomarán las medidas que sean
necesarias para lograr progresivamente que este derecho se haga plenamente
efectivo.
Artículo 31
1.
Los pueblos indígenas tienen derecho a mantener, controlar, proteger
y desarrollar su patrimonio cultural, sus conocimientos tradicionales, sus
expresiones culturales tradicionales y las manifestaciones de sus ciencias,
tecnologías y culturas, comprendidos los recursos humanos y genéticos, las
semillas, las medicinas, el conocimiento de las propiedades de
la fauna y la flora, las tradiciones
orales, las literaturas, los diseños, los deportes y juegos tradicionales, y
las artes visuales e interpretativas. También tienen derecho a mantener, controlar,
proteger y desarrollar su propiedad intelectual de dicho patrimonio cultural, sus
conocimientos tradicionales y sus expresiones culturales tradicionales.
Eso es solamente un pequeño ejemplo, aparte del excelente
derecho humano inherente, fundamental, universal y básico, como lo es el derecho a la libre determinación. De
manera que no se le vaya a ocurrir a alguien tratar de venir a definirnos. Ese
tiempo ya pasó. José no es gurú de la India, es Indígena de Borikén.
Es interesante saber que a nivel internacional, tenemos que
seguir utilizando instrumentos como El
Protocolo de Nagoya, tener organismos como lo es la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), entre otros, para asegurar la protección del
conocimiento tradicional, como es el caso de este tema. Sabemos de los muchos
casos donde representantes de farmacéuticas, entre otros, se van a comunidades
a aprender cómo se hace ésto, cómo se cura aquello, y luego se van de las
comunidades con ese conocimiento y lo promueven para lucrarse sin ningún
beneficio a quienes eran los conocedores. En algunas partes del mundo, ya se
han instituído prácticas, donde se puede obtener la medicina contemporánea,
pero también se puede integrar la Medicina Tradicional Ancestral. Además, yo
misma estando en una comunidad indígena en un cucurucho en el este de las
Himalayas, supe de médicos que venían de la ciudad a hablar con la Abuela
curandera para saber qué ella estaba haciendo y utilizando para atender y curar
las personas de su comunidad, quienes estaban muy saludables y donde una
emergencia podía significar la muerte, por la distancia extrema a un hospital.
Van allá a aprender de la Abuela. En esa parte de India la Medicina Tradicional
Ancestral es muy utilizada y respetada.
Por ende, llamar a la
Medicina Tradicional Ancestral “medicina
alternativa”, NO es correcto. Demonizar a sus conocedores NO es lo propio.
Tampoco llamarlos “médicos ciegos”
les aplica. Después de todo, a muchos de nosotros, qué nos importan los grupos
de control y hartarnos de pastillas, si algunos han encontrado alivio y una
calidad de vida que no le brindó ninguna pastillita. Los practicantes de la
Medicina Tradicional Ancestral están en todo su derecho. No están recentando: “Te
tomas 3 tylenol en la primera, 5 ibuprofen al mediodía y 8 Pastillas Tal en la
noche.” Están utilizando su legado y conocimiento ancestral, el cual es muy
valioso y se defiende a nivel internacional.
¡Pa’ mi, y ésta es mi opinión, que la preocupación es más
bien que se les vaya a caer el kiosko!
Tai Pelli